Cómo Superar El miedo Al Dentista

Esa silla extraña, esos sonidos desagradables y esas herramientas puntiagudas me dan escalofríos, y si está de acuerdo, debería unirse a mí para aprender a superar su miedo a los dentistas. La verdad es que a nadie le gusta ir al dentista, y a algunos nos da miedo incluso pensar en ello. Así que posponemos nuestras visitas y dejamos que nuestros dientes estén cada vez en peor estado.

Tenemos que aceptar que el problema no desaparecerá por sí solo y que no podemos evitar ir siempre al dentista. Al final, tendremos que ir, así que es mejor hacerlo cuanto antes para frenar el problema y evitar daños mayores en nuestros dientes, lo que supondría más visitas. Por supuesto, nuestras mentes lógicas pueden entenderlo, pero normalmente sólo lo hacemos si nos encontramos en peligro, así que aprendamos más sobre cómo superar el miedo al dentista e intentemos todo lo que podamos.

1. Elegir el dentista adecuado

El dentista adecuado para usted es aquel que comprende su miedo y no le juzga por ello, sino que actúa en consecuencia. Asegúrese que habla con el dentista y vea si se siente cómodo comunicándose con él. Preste atención al personal y al ambiente general de la clínica. No debe tener miedo de ir a la clínica, así que seleccione una clínica en la que se siente cómodo y un dentista con el que pueda comunicarse fácilmente.

2. Conozca a su dentista

Estamos aprendiendo a superar el miedo al dentista, pero en realidad no tememos a la persona que hay detrás de la máscara, sino a lo que nos hará y al dolor que conlleva el procedimiento. ¿O no? Tener una figura aterradora con una mascarilla que se cierne sobre ti con una aguja en la mano puede dar miedo, y a menudo olvidamos que hay seres humanos reales debajo de esas batas blancas. Por eso es buena idea conocer mejor su dentista.

Hable con ello y comparta con ello lo que teme, sean las agujas o el dolor. Y lo que es más importante, conózcalo como persona, no como dentista. Esto no significa que tenga que hacerse amigo de su dentista, pero sea consciente de que es una persona como cualquier otra.

3. Hable con su dentista sobre sus miedos

¿Es adulto y tiene miedo al dentista? Estoy aquí para decirle que no tiene nada de vergonzoso. Muchas personas tienen ansiedad y miedo al dentista, pero se sienten demasiado avergonzadas para hablar de ello. Tenga en cuenta que su dentista ya está muy familiarizado con este miedo, ya que la mayoría de sus pacientes probablemente se sientan igual. Por lo tanto, informe a su dentista sobre su fobia antes de la cita.

4. Acostúmbrese a todas las herramientas

Las herramientas parecen sacadas de una cámara de tortura o de una película de terror, ¿verdad? Lo que hace que parezcan aún más aterradoras es que sólo las vemos justo antes de que estén a punto de causarnos molestias o incluso dolor. Por eso, una parte importante de aprender a superar el miedo al dentista es pedirle a su dentista que le ayude a familiarizarse con las herramientas. El dentista puede dejarle coger los instrumentos y explicarle cuál se utiliza y para qué. Esto ayudará a su mente asustada a darse cuenta de que estos no son los objetos para la tortura, sino el simple equipo del médico.

5. Infórmese sobre lo que hará el dentista

La gente siempre ha temido lo desconocido. La mayoría de las veces tenemos miedo de cosas que no entendemos, así que infórmese sobre los procedimientos que le hará su dentista. Lea sobre ellos y familiarícese con los términos que utilizan los dentistas. Pida siempre a su dentista que le aclare el procedimiento que va a realizar. Esto eliminará ese manto de misterio que provoca el miedo y le hará estar más relajado.

6. Acuerde un señal con la mano para cuando sienta dolor

Puede hacerle a su dentista un gesto cada vez que quiera que deje de hacer lo que está haciendo, y hacer descansos tampoco tiene nada de malo. Puede que tarde más en salir de la clínica, pero la visita será menos desagradable. Tal vez pueda hablar de algo que no tenga que ver con su cita durante las pausas, de modo que pueda tomarse un tiempo y relajarse.

7. Cuide sus dientes

La mejor prevención para las visitas dolorosas al dentista es cuidar bien los dientes. Asegúrese de cepillarse los dientes con regularidad y no posponga las visitas al dentista, ya que son imprescindibles. Recuerde: cuanto más espere, más trabajo tendrá que hacer su dentista, lo que significa consultas más largas, más visitas y más dolor.

8. Traiga a su pareja

No hay nada malo en llevar a alguien para poder cogerle de la mano o hacer que ponga cara de valiente por su presencia. No hace falta ser un niño para disfrutar de la presencia de alguien durante el procedimiento, e incluso pueden prometerle que le llevarán a tomar un helado más tarde. Sí, también funciona en adultos.

9. Escuchar música

Estas herramientas suenan aterradoras, pero pueden parecer incluso más aterradoras de lo que realmente son. Aprender a superar el miedo al dentista incluye distraerse de esos horribles sonidos. Utilice sus auriculares y escuche música durante el procedimiento, ¿por qué no?

10. Pida anestesia

Por último, siempre puede pedir anestesia local, y con suerte lo hará hasta que empiecen a utilizar anestesia total en cada visita al dentista (¿no sería estupendo?). Recuerde siempre que lo que sentirá será más una leve molestia que un dolor intolerable, por mucho que piense lo contrario cuando tenga que pedir cita. Enseñe a sus hijos la higiene dental para que tengan que visitar al dentista lo menos posible, ¡y ojalá tengan menos miedo que usted antes de utilizar estos consejos!

Bárbara Lopes